Ayer fui a ver Drácula 3D, siguiendo con mi obligación moral de ver todas las películas 3D que se estrenen en algún cine más o menos cercano a donde esté.
Estuve en la sala 8 de los Megacine Badalona. Gafas XpanD, pantalla de tamaño considerable, vibration system en las sillas VIP, Dolby 7.1 … pero la vi completamente solo.
Según leí, tras 1 semana en cartel en 132 salas ha hecho 350€ de promedio por sala. No me extraña.
La peli empieza mal, con unos títulos 3D muy mal puestos sobre un plano de vuelo virtual por un pueblo antiguo animado en CGI.
El resto de estereoscopía muy correcto. Muchos problemas de polarizaciones, pero bien hecha globalmente.
La peli, filmada con SONY F3 y Arri Alexa, demuestra que las buenas cámaras no son suficientes para hacer una buena fotografía.
Las animaciones y efectos visuales son de serie B.
El guión y la música, de serie Z.
Las actrices, lo mejor de la peli: guapísimas. Me ha sorprendido en los títulos de crédito ver que se considera esta película «bien cultural». Supongo que será por las imágenes del pueblo de aires medievales.
Triste es ver a Rutger Hauer poniendo su nombre al servicio de una peli así. Como decía Coppola, debe ser uno de esos trabajos «alimenticios».
Para mi gusto, la película no aporta nada al mito de Drácula.
Gracioso es para mi, que el actor que interpreta al conde Drácula, me recordara a un cruce entre Iñaki Urdangarín y el comandante de la Estrella de la Muerte en Star Wars capítulo IV.
El pater, parecía el primo de Bud Spencer.
Mi puntuación: 0 de 5.